El nombre de este cuento nos refiere inmediatamente a uno del genial Julio Cortázar, llamado "Casa Tomada" y aunque la historia no se parece en nada a la de éste gran escritor, me atreví a nombrarlo así como un humilde pero sincero homenaje a quien tanto aportó al mundo de las letras. Como siempre, espero que lo disfruten...
“Casa Soñada”
Por: Arturo Pérez Arteaga :.
Todo en aquella casa era de una gran belleza, los detalles en su diseño, su impresionante estructura y la calidez experimentada de sólo mirarla la llevaron a la categoría de legendaria, atributos estos que la hicieron famosa allende las fronteras del remoto pueblo donde estaba, por lo que cada día recibía peregrinaciones de los cuatro puntos cardinales, no obstante, lo que realmente constituía una entelequia era su patio, porque aquel era efectivamente mágico. Esto se debía a que su dueño, don Amador Sepúlveda, quien habitaba la casa desde que existía, con la mayor amabilidad que ser humano alguna haya demostrado en ese o en cualquier lugar, podía diseñar el patio una y otra vez con paisajes mil, cada uno más hermoso, más inverosímil y más fantástico que el anterior, con sólo soñarlo.
Don Amador solamente debía retirarse a sus habitaciones para
disfrutar del justo descanso nocturno y al día siguiente aparecería el patio
ocupado por palacios orientales, albercas veraniegas, pirámides perfectas,
jardines magníficos, diseños psicodélicos o cualquier otro ambiente que éste
fuese capaz de soñar, porque de sólo hacerlo de inmediato se materializaba en
su patio el paisaje producido en su arquitectura onírica.
Sólo una vez se había registrado una situación poco agradable,
al llegar los turistas encontraron en el patio a una serie de animales
extraños, seres mitológicos y demonios insospechados, todos sujetos por fuertes
cadenas a sendas columnas que les evitaban moverse. Ese día, fue suspendido el
acceso al público y a partir de allí los miles de visitantes a ese patio de
embrujo, pedían que el sueño de don Amador hubiese sido realmente placentero
para poder disfrutar de una maravilla durante su estada, los más osados incluso
intentaban hacerle llegar videos y fotografías de paisajes quiméricos que de
alguna manera le influyeran a la hora de dormir.
Era tal la magnificencia de aquel patio que nadie nunca
consideró lo que ocurriría esa mañana. Los excursionistas tuvieron una gran
decepción, al llegar el lugar no denotaba transformación alguna, tocaron a las
puertas de la casa para consultar a don Amador qué había ocurrido, pero este no
apareció y quienes se atrevieron a asomarse a través de las ventanas pudieron
distinguir algunos de los demonios y seres de la pesadilla anterior, esta vez
sin cadenas.
-APA-
A lo Edgar Alan Poe en el desenlace final. Maravilloso! A diferencia de lo esperado, el final es endemoniado lo que en su génesis es angelical, de pura belleza. ¿Será que al primer rasguño de la piel de la civilización se asome por debajo de la epidermis los pelos endemoniados de los monstruos reprimidos por la cultura de plástico?
ResponderEliminarCaramba hermano, me halaga con ese comentario... compararlo con el estilo de Poe son palabras mayores... que bueno que te gustó
ResponderEliminarMuy bueno mi amigo
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